Como diría Valle-Inclán, me quito el cráneo. Me descubro ante esta brillante muestra de nihilismo. Después de aquel titular de Metro en el que se afirmaba "Al Papa le queda una semana" no había visto nada mejor. Además, la canonización de Juanpi Sorín nos recuerda a la figura de Jesucristo, nos acerca a la Iglesia maradonista y ratifica el principo establecido por topo, según el cual "siempre hubo un melenudo en la albiceleste". Magnífico.
3 comentarios
marquinho -
am: -
Pac Durán -